El alcance y el grado de complejidad dependerá del objetivo del proyecto: la problemática a resolver. Lo que siempre caracteriza a los diseños de AINTSA es el enfoque que damos a nuestros trabajos.

En AINTSA los diseños comienzan siempre a partir de tres elementos:
- La idea o problemática a resolver
- El entorno donde se va a desenvolver
- Los Principios de Diseño

Los proyectos surgen siempre (salvo contadas ocasiones) con unas especificaciones muy vagas (ideas). Antes de proceder a abordar el problema hay que refinar la definición para poder obtener lo que técnicamente se denominan reglas de negocio.

El entorno donde se va a rodar el futuro sistema es otro aspecto especialmente importante. Aquí hablamos de entorno físico, personas que van a utilizarlo (sus conocimientos y aptitudes), la arquitectura… Y también la horquilla de presupuesto objetivo disponible (todo problema tiene más de una solución).

Un aspecto diferenciador de nuestros diseños es el cuidar especialmente los requerimientos de explotación. La tecnología “engancha” y al final, si nos dejamos llevar más allá de lo debido, podremos acabar teniendo un sistema que precise unos conocimientos y atención quizá insostenibles (o no previstos inicialmente). Quizá no sea complicado para el especialista, pero ¿tendremos este especialista disponible?, ¿tendrá vacaciones?...

Los Principios de Diseño normalmente se recogen en una simple frase (o párrafo), construido de forma que si se tiene siempre presente avanzaremos en la dirección correcta. Poder llegar a esto requiere mucha práctica.

Una definición precisa, especificaciones suficientes, indicaciones de lo que hay que hacer y sobre todo en lo que no hay que caer y dejando un grado de libertad imprescindible para el personal de desarrollo son la marca distintiva de los Diseños de AINTSA.

Nuestra experiencia en todas las áreas de Sistemas de Información nos dicta que un error frecuente en el diseño es el de sobreactuar y generar especificaciones demasiado detalladas que o bien limitan la capacidad del personal de desarrollo o bien pueden confundirles (esto no es ninguna tontería: recordemos a aquél profesor que nos complicaba la vida dándonos más información de la necesaria y a aquellos otros que por la información que nos daban ya intuíamos por dónde andaba la solución).